El Daily Telegraph

Hace cinco años que me comunico casi todos los días por email con mi amigo Franco que está en Rosario.El desde su laburo y yo desde el mío. Algunas veces nos hemos mandado cerca de 20 emails en un mismo día, y no sé si más todavía. Por intermedio de estas misivas me he mantenido al tanto de muchas cosas, algunas malas, y la mayoria neutrales,como las llamo; las buenas pasan desapercibidas. Así hemos mantenido un vinculito, un chorrito de muestra de nuestra amistad allá en Rosario. En todo caso, antes de sacar a relucir el tango, lo quería señalar porque puestos a pensar es una acto de constancia extraordinaria, aún en casos en que era obvio que una de las partes no estaba interesada en el diálogo. Pero ya sabemos como funciona la mente masculina. Ejemplo:
- Eu!
- Mmmm
- Uh
- Eh
Et voilá.
Casi siempre hemos contestado emails manteniendo copia del anterior, habiéndose formado increíbles chorizos de texto infernales. Más allá del contenido, si analizamos la cantidad de bytes consumidos creo que podríamos llenar un par de humildes Mb de memoria.
A saber:
Digamos que entre vacaciones, feriados, fines de semana y caídas de servidores, tenemos unos 200 días de comunicación efectiva, lo que hace unos buenos 1000 días en 5 años, ma o meno. Y después supongamos que nos escribimos 10 mensajes por día, ma o meno, y que cada mensaje empieza como algo simple de 2kb, lo que al final del dia hace, ma o meno, tomando el ejemplo de ayer que fue un día promedio, unos 200kb por cabeza. Así que son 400Kb en total, eso sin contar fotos, chistes, cadenas formadas por otras cosas, etc.Así que en total tenemos 400k x 1000 = 400000 kb, que son, ma o meno, 40Mb, lo que son alrededor de 28 floppy disks de 3 1/2 o un disco rígido de las viejas 386. Y capaz que sean un poco más todavía.
Igual, ahora no suena a mucho, porque esos 40 Mb entran cómodamente en un mísero palito USB o en la memoria de una cámara digital. Pero, póngase a pensar señora en todo lo que nos dijimos en estos 1000 días de comunicación interrumpida.
Después dicen que los hombres no hablamos.
Eh.