Hoy es San Patricio, mañana es San Perón

Hoy, día peronista, clima benévolo por obra y gracia del altísimo frente de alta presión proveniente del norte que perdurará en la zona hasta el día miércoles próximo futuro, festivo, feriado y familiar, el pueblo trabajador irlandés se congrega y regocija en la celebración de su más santo santo, San Patricio.
Es un día para celebrar, no tanto para tomar, pero si vas hecho pelota el martes a trabajar nadie te va a decir nada, los niños se han estado preparando todo el año para el desfile (o a último momento, quién sabe, hay cada niño) y en cada pueblo, ciudad, aldea y villorrio se siente la excitacíón desde tempranas horas. Al terminar el día los noticieros mostrarán imágenes de ignotos pueblos unidos en el jolgorio de la celebración comunal. La Irlanda antigua, rural, autóctona y sencilla hoy sigue mostrando su rostro marcado de arrugas de sabiduría a través de los aires de capitalismo y suceso económico que campea, como bandera de triunfo, sobre las verdes praderas adonde una vez supo cabalgar libre, el gaucho.
San Patricio hizo de todo, hasta casi nacionalizar los ferrocarriles, cosa que solamente pudo hacer el General y eso que acá también eran ingleses. Expulsó a las serpientes de Irlanda e hizo la primera ensalada de trébol, mientras les explicaba a estos bárbaros qué era la Santísima Trinidad y que no, no se toma. Anduvo convirtiendo reyes y altos jefes, chieftains locales, caminando descalzo la totalidad de Irlanda, durmiendo en la roca, en la montaña, santificando todo, haciendo una unidad básica allí adonde se la necesitara. Grande San Patricio.

Si quieren saber más sobre el desfile pueden visitar ESTE LINK con detalles de la organización, el recorrido en Galway, fotos de los año anteriores, etc. Si quieren ver así como quien no quiere la cosa, espiando desde la terraza, hagan como Pinky y miren el desfile cuando pasa por el O'Connell Bridge de Dublin a través de esta cámara web. Según parece el clima no es tan bueno en la capital pero nada detendrá los festejos, siempre hay refugio de la intemperie en un pub.
Bueno, me voy a trabajar, hoy no hay desfile para mi, encima estoy tomando antibióticos así que tampoco puedo saborear las hidromieles y fermentos del éxito, pero no importa, regocijado en la patria trabajadora raudo acudo al llamado de la sirena de la fábrica; de la casa al trabajo, del trabajo al supermercado y después a casa, si, a cocinar.



San Patricio conviertendo a las Celtíberas de Bolaynas.