La Tranquera, la biografía, el auto.

1) Hoy, paveando en una librería vi la biografía de Michael Ballack, el pibe que ayer se atragantó con medio kilo de derrota en almíbar y bien merecida que la tiene por arrogante, pedante y tunante que no mentiroso, exagerado y llorón que son todas cosas que hace en lugar de jugar al fútbol que es para lo que le pagan y eso que es alemán y sabe bien cual es su deber que es jugar a la pelota con los pies y eventualmente con la cabeza de lado de afuera y de adentro, como un guante pero sin dedos y sin chistar, carajo.
Este muchacho tiene publicada una biografía de mas o menos 1000 páginas y ha vivido hasta ahora tres años menos que yo. Esto no cuadra. Que yo no cuadre vaya y pase porque cada día estoy más redondeado, pero que un tipo de 32 años que lo único que ha venido haciendo es correr atrás de una pelotita y fingir que le han violado los tobillos escriba la narración de su vida, eso si que es peligroso. Michael Ballack, podrás haber ganado más guita que yo, pero si sólo por eso fuera deberías tener un libro con 15 millones de páginas, una por cada billete, pero nada más, no debe haber nada más aséptico y aburrido que un jugador de fútbol alemán. No sé, como que no va, si la escribiera a los 50 años por ahí se justifica pero ahora no, más si viene saliendo segundo a cualquier cosa.
Así que pensé en escribir mi biografía. El blog no es mi biografía, no cuento todo lo que hice o todo lo que estoy haciendo, no es mi bitácora. Es más, mucha gente que lee este blog no sabe si soy un ejemplar ejemplar de macho o simplemente un chimpancé bien entrenado fingiendo una vida humana desde una reserva en Botswana. Lo mismo da, el resultado es la misma colección inconexa o sin nexos de palabrerío vacío y vano, pero sin vanidad motora, aclaro. Osea, decía, qué podría decir yo de mi vida, de estas 35 vueltas alrededor del sol de las cuales me ha tocado ser testigo? Y más complicado la tendría si viviera en un sistema solar con dos soles. Yo, que una vez me sentí millonario cuando un bicicletero me dijo "tomá pibe" y me dió como 200 gomines gratis.
Esto termina así, inconcluso, no sé, Michael Ballack, no existís.

2) Yo tomo mate porque en el fondo tengo miedo de que mi cuerpo no reciba nutrientes argentinos y de golpe un día mis células ya no tengan átomos pampeanos, ecuestres y silvestres arrastrados por la infusión de yerba La Tranquera. Mal día aquel en el que mi cuerpo se desnutra y me encuentre enterrado vivo y mudo en un cuerpo que no me pertenece, como usurpado. Como los usurpadores de cuerpos.

3) Hoy fuí al mecánico para que le arregle los frenos a la cucaracha mecánica y me cobró menos de la mitad de lo que me había pasado otro tipo. También le cambió el aceite y me dejó el viejo en un tarro para que me haga tortafritas y buñuelos, me limpió una válvula que regula la entrada de aire en la mezcla y me ajustó el condensador de flujo para poder viajar en el tiempo y así finalmente comprar el peluche de Alf y colgarlo del espejo. O el de Goma-goma.