Cerdeña

1) Cerdeña forma parte de Italia por lo tanto está llena de italianos y no hay ni una moneda. Ya lo dijo Tácito en sus "Diálogos dell'Orto": "...si hay algo que me revienta de nosotros los romanos es que nunca nadie tiene una moneda. Vas al Circo, vas al foro, vas al Coliseo y todos te piden la monedita. Me temo que este es un rasgo característico de nuestro pueblo y que arrastraremos este sino durante los siglos de los siglos. Los dioses se apiaden de nuestros nietos...".
Y así es nomás, estoy seguro de que en el barrio italiano de Sidney o en la Little Italy de NY así como en Argentina nadie nunca tiene una moneda o, si tiene, te la pide igual per codere. La futura colonia espacial italiana en Alfa Centauri "Siamofuori IV" avisará a sus futuros visitantes "por favor pague con cambio".

2) Cerdeña ha estado habitada desde hace 250000 años. Han pasado la civilización nughárica, los pueblos del mar, los fenicios, Cártago, Roma, los vándalos, los árabes, el reino de Aragón e Italia en su muy muchas variantes. Según la curva del camino se escucha en la misma frecuencia una radio en francés, en español o en italiano. En algunas paredes o en rocas al costado del camino se lee "Cerdeña Libre, fuera italianos!!".
Y en una isla pequeña de la isla, adonde nunca llueve, está la tumba de Garibaldi, que no era bobo.

3) Dentro de una roca enorme hay una gruta. De día los turistas bajan y escuchan a los guías, se sienten pequeños, perdidos, sofocados insectos en las entrañas intolerantes de la tierra. Bajan de un barco con pie precario y confían en seres tan frágiles como ellos que los meten como un rebaño por 5 euros. Pero la gruta también es bella y hasta un viejo rey de Italia ha dejado su nombre grabado para atestiguar su visita. Desde que el rey hay pisado, desde que el público se alumnbraba con antorchas y desde que una orquesta clásica ejecutaba finas piezas para aquellos distinguidos se ha formado apenas un centímetro cúbico de estalactica.
Pero por las noches mientras el faro mira al frente con su ojo a sus espaldas se cuela el dios Neptuno y lo que queda de su séquito con esos nombres de la mitología que todos hemos descartado y avanza con el rumor del viento entre la barba y reclama por un rato sus aposentos, todo el mar tiembla y duermen intranquilos en sus camas, los turistas.

4) Si quieren ver fotos, aquí tienen: FOTOS