Con el talento de Quique.


1) Me caigo por la escalera y me despierto tres días después con la voz de Quique Pesoa. Voy al supermercado y la cajera me regala todo, con esa voz dice.
Voy a una institución y me dan un crédito bancario y me compro un Taunus marmolado. Llego a casa y le digo a mi mujer plancháme los calzoncillos con raya al medio y hacéte una pastafrola y esta vez vá y lo hace.
Qué bueno tener la voz de Quique Pesoa.

2) Me esguinzo una gamba y estoy dos meses con muletas, el día que me dan de alta voy a un templo y hago cola para el momento de los milagros. Largo las muletas en público extasiado de amor divino al grito de "Viva Charles Ingalls!" con la voz de Quique Pesoa y me pagan todos los gastos. Me quedo a comer asado.

3) Decido compartir mi talento con el mundo. Saco un disco de poesías para el día de la madre intitulado "Vieja Querida cuanto te quiero, si tuviera dos madres te querría más que a mi otra vieja". Disco de Adamantium en una semana, me piden que cante la nueva marcha peronista 2.0.

4) Canto la marcha peronista con tal éxito que se unifica el movimiento. Tiembla la derecha y el heredero de Braden. Tengo que usar camisa.
Me llaman para la reinauguración del Monumento a la Mandarina que por fin va a recuperar todos sus gajos.

5) Me entrevisto con Obama, juntos entonamos "Siempre fuimos compañeros" y decide devolver el Premio Nobel embuido de un súbito espíritu altruista. Me dice "gracias negrito".

6) Hago un llamado a la unión americana. Me llaman el Quique Bolivariano o el Che Gordo.

7) Al final, agobiado por el éxito y las responsabilidades gano las elecciones presidenciales del glorioso Newell's Old Boys y logramos ganar el campeonato, la Libertadores y el Mundial amparados en el nuevo decreto de necedad y urgencia que dice "Equipo que gana el campeonato va al Mundial".

8) Me llama Diego y me dice querés que te la...? No, dejá, le digo.

9) Me llega un telegrama de Quique Pesoa pidiéndome una audiencia consuetudinaria. Quedamos en encontrarnos, me pongo una cala en la solapa así me reconoce en la esquina de La Favorita, ahí en Rosario. Llega y me dice, mirando con cautela para todos lados, flaco hace cinco años me caí por la escaleras y desde entonces hablo con esta voz de pito. Hace cinco años que vivo angustiado, no querés que cambiemos?
No, le digo, vas a tener que seguir buscando por que esa voz mía no era. Se moquea toda la barba llorando y le pago un taxi que se pierde en la humedad asfáltica de la madrugada. Le alcanzo a preguntar si todavía tiene el Citroen amarillo y no dice nada, como un pibe atrás de la ventanilla empañada que mira la luz del semáforo.

Oda a la madre.


Oh madre ovnipresente que todo lo calcula de antemano
para acabar con mis planes de gusano manzánico atropellado.


Oh madre cosedora y cociente que sabe de maquetas,
planos
y frascos con insectos arrancados de la oscura materia de las macetas a altas horas de la noche.

Oh madre que cruza avenidas buscando hueveras envuelta en mantos
mientras el pampero arrecia ahí, doblando las vías, enfrente de la gomería.

Oh madre que me has dado la vida y ahora me la sacas criticándome la novia.

Oh madre que imagíname una cátedra, respetables guardapolvos con apellido bordado y hasta un casco blanco de ingeniero y en el fondo tu pecho de talco tiembla al ver mi título terciario impreso en egipcios papiros sucedáneos.

Oh madre, tú madre, o tu madre llegado el caso, porque es que si son todas iguales,
la del turco, del griego, del semita, del bantú, del pobre hindú,
la del chino violinista,
o la del anglosaxon conquistador obligado a imperializar cualquier isla, pero una isla.

Oh madre del masculino con suerte que no debe competir contigo como hija.
Oh madre la del pullover siempre a mano, haré de tí un molumento autóctono

a la madre vieja y la madre nueva, la que anda sin marido, la que trabaja,
la que le gustan otras madres, la que maneja el tractor, la astronauta, la del Discovery
y la que recoje la naranja con o sin ombligo.

A todas esas madres yo les digo, no, no hace tanto frío!

Ah, si, y yo te amo.



Muy bien te felicito Motonet pero debes mejorar tu caligrafía, ortografía y la pulcritud de tu guardapolvos al tiempo que pules la ritma elegante que todo poema debería tener y de paso la métrica que está un poco desajustada pero mientras no intentes hacer de esto una carrera, dale nomás, no creo que algún día inventen un medio masivo de publicación de textos e ideas que sea libre y al alcance de cualquier pavo.
Continúa así!

Collage de situaciones.


En una realidad paralela la gente se levanta las once y se apura a almorzar porque ya se le viene la siesta.
Los turnos rotativos no existen y los padres aconsejan a sus hijas que no frecuenten la compañia de jóvenes psicópata antisociales demasiado productivos de pelo recortado y de dudosas capacidades creativas y solidarias.
La gente vive hasta los 120 años sin necesidad de andar tomando porquerías y las únicas arrugas que se valoran son las que deja la risa y el ocasional llanto.
Las manos son sagradas y se educan para la música, la literatura y para gesticular las historias verdaderas o inventadas.

Y a dormir bien tarde que es cuando mejor se ven las estrellas.

Pero es entonces cuando los científicos encienden sin un traqueteo el Acelerador de Partículas y en un nada explosivo evento catastrófico nuestra realidad se mezcla con aquella, el aire se vuelve amargo y denso como gelatina sin sabor y el mundo parece detenerse como un colectivo que cambia de opinión frente a una parada, interrumpe la frenada y continúa total atrás ya viene el próximo, señora.
Sin embargo ya no es lo mismo.
Millones de personas faltan al trabajo, ni siquiera llaman para mentir que están enfermos. Se quedan perplejos frente al espejo, en piyamas, despeinados, con la baba blanca del dentrífico colgando, preguntándose que horas son estas de andar despertando. Otros operarios frenan sus máquinas poque no entienden la necesidad de hacer lo que están haciendo y nadie les dice nada. Así los trenes detienen su marcha, aburridos.
En el silencio perplejo de la mañana nadie puede entender como es que hemos hecho todo esto.

Ese día el sistema productivo se atranca y se raja vomitando millones de unidades monetarias de pérdidas como una jarra inflamada, un reloj de arena sin parte de abajo que marca absolutamente nada en su colapso.
En tanto, en la realidad alternativa, ya se han creado grupos de planificación, se sientan las bases para los nuevos sistemas de producción en cadena y aprovechamiento del tiempo en los rudimentarios molinos de madera tallada que, de pronto, son considerados obsoletos con sus aspas ineficientes como alas de pajáro enfermo.
Se mejoran y extienden los sistema de irrigación y de caminos que se antojan ahora aleatoriamente empedrados. Se organizan brigadas armadas para contener el ordenm asegurar el bienestar y de paso forzar a los pocos desacatados mal acostumbrados a salir de sus casas entre la burla y el escarnio.
Sus propiedades comunitarias expropiadas y repartidas entre los miembros productivos de una nueva y pujante sociedad.

Canterville


1) De a poco el país que uno dejó en carbonita demuestra que no está tan congelado, como una lengua de glaciar te hace un valle entre la roca,como una lengua de gato gigantesca que raspa lo inraspable y hace ese ruidito a papel de lija, así avanza.
Los parientes envejecen y se van derechizando, los amigos maduran, se reproducen, van de vacaciones a Carlos Paz o a Mar del Plata, hacen asados y dicen que los alemanes perdieron en Rusia por el frío, los chicos crecen y te piden guita, los referentes culturales van muriendo y pasan a consolidarse en la inmortal memoria del pueblo.
Osea que son siempre recordados mal, porque la verdad que la memoria humana es bastante selectiva por no decir exquisitamente tarada.
Eso de irse y morirse es cierto, porque es como ver que hacen los demás en tu ausencia. Lo bueno es que en esta muerte, hay blog. Lo malo es que uno tiene la misma consistencia del ectoplasma.

2) Hay que ser honestos, todos los bloggers debemos confesar cómo somos en realidad. No digo mostrar una foto sino decir cómo somos de personalidad personal reinante, porque convengamos que el blog destiñe y hasta mejora. Yo, por ejemplo, parezco un buen tipo, divertido, ocurrente y hasta gordo.
Empiezo yo: soy gruñón, retraido, amargado, taimado y mal parido. Pero de onda.

3) Me dieron un vuelto y había una moneda de un euro con la efigie trajeada del Rey Juan Carlos de Borbón. Se la mostré a mi compañero español mientras exclamaba: súbdito, doblégate en sumisión ante tu ínclito soberano!!!
Cero reacción. Lo amenacé con llamar a la embajada pero nada, cero reacción todavía.
Le pregunté si como súbdito debía postrarse y obedecer a rajatablas la voluntad real consistiese ésta en entregar propiedad, perro, ganado y hasta prima nocte llegado el caso, pero me dijo que ni loco.
Con gente así, no es bueno ser rey.

4) Vamos a ser sinceros, a Obama le dieron el Premio Nobel al Buen Tipo.

Hombre al agua y la búsqueda argentina de la alegría.

1) Las minas se quejan porque pueden. Dicen no me puedo poner bikini, tengo que ponerme una malla entera. Y uno las mira como un perro mira un ciclotrón y después mira los dos shores, ese apretado, ese muy grande, pero los dos con su forro interno, esa malla de los trapecistas gemelos brindando soporte y ventilación simultánea.
No hay dos piezas, hay una sola. No hay manera de disimular nada, Si te ponés el short más chico es como estrangular una mortadela por el medio, si te ponés el más grande es como mojar una sábana, imposible desplazarse en el agua. Pero sea como sea, la panza siempre queda afuera y uno se tiene que quedar leyendo o metiendo panza al borde del agua cruzando los brazos.

No se quejen, podrían no tener tetas.

2) O podrían tener estas tetas.

3) Mucho se habla de los argentinos que se han ido a probar suerte a distintos rincones del orbe e, incluso, a otras urbes. Pero nadie habla de los argentinos que se transmutan, se transvisten en brasileños.
Todos los años miles de argentinos cruzan la frontera para someterse a una operación de la que no hay retorno.
Finalizado el período postoperatorio son pocos los que vuelven a su lugar natal. La mayoría, alertada de antemano por los profesionales u otros parientes que ya han pasado por el proceso, han realizado todos los trámites de radicación y residencia. Muchos sufren un shock, no de adaptación pero de aceptación de su pasado, porque un argentino puede convertirse en brasileiro pero la ciencia aún no ha encontrado la manera de borrar la memoria.
Muchos optan por adquirir un pasado ficticio, por una suma mada desprecible es posible comprar una vida, una raíz en la nueva patria. Las empresas de redacción y confección de pasados abundan en el pais del parambimbao y la sucurumbinha.
Al cliente se le ofrece una breve novelización de su vida y, mediante la técnica de la hipnosis se le refuerzan los hechos hasta que estos se superponen con los ya existentes.
Es como un callo en la memoria, en el fondo está el tejido inicial, pero arriba hay una dureza, nos dice Calzonsinho, un ex-argentino que por momentos elige volver a serlo. A veces involuntariamente, nos dice, más que nada cuando huelo carne asada o si me quemo con la plancha, o con las cosas mas nimias, como mirar el cielo y discernir los colores de la ex-enseña patria. Pero con mirar un helecho o un limón se me pasa, confiesa. Siempre llevo un limón y un helecho para recordar la bandera del orden y el progreso.
Tomatelas le decimos y lo dejamos levemente perplejo mientras se calza una chancleta y masca una banana sin el más mínimo gesto de preocupación en el rostro y nos vamos al aeropuerto más cercano para huir despavoridos y dejar este paraíso de la traición y el olvido.
Con dolor escuchamos un último saludo amistoso: los esperamos en el 2016 para las Olimpiadas mais grande do mundo!