Silverland

Se descubre finalmente que el peronismo y sus padres y adlátares políticos son causados por un virus que se cura al mismo tiempo con los antivirales de la gripe A por error pero simultáneamente, de pronto todo el mundo exclama, como despertando de un trance algunos, aliviados los inoculados de siempre viendo volver a su parentela, que vuelvan los milicos y que viva el doctor, se erige una tranquera enorme desde el Obelisco hasta el Monumento a la Bandera y se alambra el territorio de la Patria pero se devuelve al indio a una muy acotada fracción del desierto para poder así mandar a vagos y desacatatos a los fortines y destacamentos para que de una vez, vuelto el servicio militar obligatorio, se hagan hombres de bien y de provecho. De paso como atracción antropológica pero sin molestar a Bennetton.
Se prohibe la guitarra, el mate, la espuela y el alambre para improvisar parrillas so pretexto de no volver a cometer los mismos errores y empezar todo de nuevo. Se prohibe el caudillaje, todos los panes son caseros.
Se expulsa a la gringada y a la gallegada excepto al ibérico vasco y todo lo que tenga conexión patricia, se permiten galeses que igualmente se las toman y la mitad de los irlandeses que no saben que lo son, se queda; se trae al inglés y al teutón protestante, siempre y cuando se respete a la iglesia, para tutelar el crecimiento del árbol generacional futuro y fomentar la conducta recta, la industria afanosa y en fin, todos los rasgos nobles de la raza.
Todos los cuadernos son Rivadavia, todos los argentinos dextrógiros antropomórficos, se funden ciertas estatuas para hacer miles de llaves, se borra de la historia a Pepitito Marrone, se deja de usar la cuba electrolítica para dispensar electrones de otras maneras menos submarinas, en fin, se hacen uno la acción y el verbo, se deja la hipocresía de lado, basta de tibios medios fríos y de duros medios blandos, abramos el mercado, leamos La Nación en las escuelas, limpiemos las instituciones de impertinentes corruptos desconocidos, pongamos a ese buen amigo de apellido franco, volvamos a ser el sur de los Estados Unidos antes de la guerra.

3 comentarios:

SpinDoctor dijo...

con las estatuas fundidas en vez de llaves se levantan estatutas de roca en cada country

Malen dijo...

Esto es una genialidad, pa' variar. Y si no fuera porque me imagino que lo que decis puede llegar a pasar, estaria riéndome.

perica dijo...

muerte al Tamiflú.


otro texto para el Colón (no el de santa fe, el de aca. ah esta cerrado hace dos anios. bue, viva macri.)